Todo
el entrenamiento es inútil. Todos los esfuerzos se pierden. Los cambios no
perduran. La gente se desanima. La moral se desvanece. El progreso no se
ve ni toma lugar.
Todas
estas calamidades y más son el resultado de ¡No Dar Seguimiento!
¿Por
qué no damos seguimiento? Simplemente parece que ¡no tenemos el hábito!
Quizás este sea uno de los cambios iniciales que debemos incorporar en
nuestra nueva cultura. Como he dicho antes y lo seguiré diciendo: el TPM
y la Manufactura Esbelta son culturales, más bien que técnicos.
Si
adquirimos el hábito de dar seguimiento a nuestros proyectos, cualquiera
que sea su tamaño, lograremos resultados permanentes. Y si nos proponemos
hacerlo constantemente por unas cuantas semanas, lograremos crear el
hábito que será simplemente una parte de nuestra nueva forma de hacer
las cosas.
Cuando
finalizamos un evento Kaizén, apenas ha comenzado el mejoramiento. Es como
un recién nacido,
una pequeña criatura indefensa. Si simplemente damos por descontado que
está vivo, y lo abandonamos, ¿qué le va a suceder? Ya sabemos la
respuesta. Habremos desperdiciado una buena oportunidad de progreso.
Hace unos meses
tuve el privilegio de trabajar con una empresa que tiene una estructura
perfecta al respecto. Tuvimos un evento Kaizén muy exitoso con ahorros
multimillonarios y ahí está, funcionando ¡vivo! No es por casualidad
que el mejoramiento está reafirmando su éxito y extendiendo su
influencia a otras áreas de la planta. Esta gente está convencida del
tremendo ¡Poder del Seguimiento!
Esta empresa
tiene a una excelente Gerente de Mejoramiento Continuo de tiempo
completo. Ella ha logrado mantener el interés y alto nivel de
involucramiento del grupo Kaizén, de tal forma que todos ellos están muy
orgullosos de ver cada paso del éxito que están logrando. Y no sólo eso,
sino que están transfiriendo su entusiasmo a otras áreas de la planta y
ayudándoles a implementar mejorías en los cambios de arreglos y ajustes.
De esta forma los avances se están dando de manera exponencial.
Esa es la clase
de estructura que todos debemos facilitar y procurar en nuestras
respectivas empresas. Cualquiera que sea su actividad, asegúrese del
éxito de sus ideas de mejoramiento a base de simplemente darles
seguimiento hasta que se conviertan en realidad. Esto es particularmente
importante cuando estamos implementando ideas revolucionarias como el TPM
o la Manufactura Esbelta.